Según análisis, el congresista por Puno, Tomás Cenzano Sierralta y el recién elegido Francisco Ccama, estarían vinculados a la minería informal en esta parte del país.
En información publicada por un medio nacional, se destaca que la familia de Cenzano es propietaria de una mina en La Rinconada, donde operan más de 30 mil trabajadores informales. Asimismo, que
Francisco Ccama tiene varias denuncias por contaminar la cuenca del río Ramis, se sabe que es presidente de la Central de Cooperativas Mineras de San Antonio de Poto, y como tal tiene una denuncia fiscal por contaminación minera, El electo legislador alegó, sobre esto, que la actividad minera en el Ramis se practica desde hace más de cincuenta años y que la turbidez de las aguas del río siempre han permanecido con esa coloración.
Ccama no es fiable respecto de la solución de estos problemas. “No nos imaginamos, por ejemplo, a Francisco Ccama proponiendo una ley para la formalización de la minería informal”.
Tomás Cenzano Sierralta, de su parte, declaró tener el 33 por ciento de participación en la concesión minera Chibolo-2, situada en la zona de Winchumayo. También aceptó poseer el 45 por ciento de la minera Media Naranja, empresa que fuera acusada de tener una deuda con la Sunat por un monto de 240 millones de soles. No obstante, transfirió dichas acciones a su hijo.
Los pobladores de esta zona "pueden colocar congresistas y además tienen mucha capacidad para movilizar gente”.
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